carta de PEDRO
O quizás para entretener el insomnio de un disidente soviético, de mirada gélida y profunda (COMO LA SUYA), en pleno destierro siberiano, junto al inseparable telescopio, a la búsqueda del vacío dejado en el cielo por la mujer que todos buscamos en la Tierra. Telaraña el cielo nocturno donde están atrapados incluso los sueños. No señor de Parodi, no me pida ud que haga concesiones. Confórmese con que yo no informe a la CIA de su retiro austral en la America Latina. Un eminente astrofísico, agente de esa etnia alienígena que quiere exterminar la raza humana.¿Ud cree que no he notado que sus mujeres azules, sin temperatura corporal son el precio que exige en pago a sus trabajos, pertenecen a esa civilización con la que ud tiene trato?.Debería mantener un idilio con alguna napolitana abundante y pelinegra, por que su afición a esas otras sobrecogedoras hembras de origen galáctico pueden ser la pista de la que derive su captura.No olvide el comentario que le hice a lady Brodkorb cuando me mostró sus ultimas fotos.-“Mírale, Marina, si es que este señor parece humano”saludospedro